Flashbacks de Charlotte Lewis

Por enesima vez, una joven Charlotte de apenas 10 añitos de edad, volvió a preguntarle a su madre:

-Mamá, ¿Cuando volveremos a la isla?

Savia de sobras que su madre le daria largas, que le diria que la isla no existia y en fin, que le pondria cualquiera de las excusas estupidas que siempre le solia poner.
Pero esta vez Charlotte lo tenia todo preparado.
Esta vez, esperó hasta que todas las amigas de su madre, que solian juntarse los viernes por la tarde para cotillear en casa de alguna de ellas, estuviesen sentadas y presentes.
Entonces fué cuando hizo la pregunta.

Vió como su madre palidecia y su sonrisa se tensaba.

-¿De que isla hablas cielo? -le preguntó una de las susodichas amigas.

Antes de que su madre pudiera cortarla Charlotte se apresuró a responder:

-De la isla donde viven mi papá y mis hermanas.

Las mujeres de la sala miraron a Jeanette, su madre, con cara de interrogación.

Jeanette siempre havia dicho que su marido murió y desde luego jamás havia mencionado a ninguna otra hija.
La mujer sonrió incomoda y fulminó a la niña con la mirada, con una cara que no daba lugar a dudas...luego a Charlotte le caeria la bronca del quinze.

-Niños...menuda imaginación tienen...-se excusó.

-¡No me lo invento!! ¡¡Cuando vinimos a vivir aquí, vinimos de la isla!!

-Charlotte, vete a tu habitación -dijo la madre enfadada.

-Pero mamá, solo quiero....

-¡Vete ahora mismo! -levantó la voz Jeannette, cosa rara en ella (al menos delante de sus amigas).

Charlotte le echó una mala mirada a su madre y subió a su habitación.

Se sentó en la cama y alargando el brazo, abrió uno de los cajones de su mesita de noche y de debajo de la ropa, sacó un viejo y arrugado dibujo en el que se veian unas personas dibujadas con un mal trazo infantil.
Esas personas parecian un hombre, que Charlotte reconocia como a su padre, jugando con dos niñas, sus hermanas menores.
Su madre estaba al lado del hombre.
Ella estaba dibujada en el centro y en la otra esquina, lejos de todo, havia dibujado un hombre moreno con barba, del qeu apenas se recordaba pero que sin duda devia ser importante para ella pues si no no se explicaba porque salia en su dibujo.

Miró por la ventana mucho rato mas tarde.
Casi havia oscurezido y Charlotte se percató con horror que no recordaba haverse pasado tanto rato mirando el dibujo.

Vió que las amigas de su madre ya se ivan y las saludó con la mano pero ellas se limitaron a mirarla con lastima, como si creyeran que de verdad estaba loca.
Ese dia Charlotte se juró que encontraria la Isla.
La encontraria y les demostraria a todos que la mentirosa era su madre y no ella.