Hasta el gorro de Benjamin Linus (Libre)

Hasta el gorro estaba Alex de su dichoso padre.
Hasta el gorro por no soltar un taco mas grande que no era plan en esos momentos.
De su padre, Alex se lo esperaba todo...o casi todo porque la ultima revelación era que Ben no era su padre en realidad y su madre era la "Francesa Loca" de la que habia escuchado hablar durante toda su vida pero sin relacionarla con su persona.
Y asi de repente, va y se lo suelta. Y ala, saluda a mamá. Todos contentos y felizes.
Pero Alex no estaba contenta y mucho menos feliz.
Se sentia como una mierda, hablando claro.
No es que no se alegrara de conocer a su madre. Todo lo contrario.
Esa mujer le gustaba. La habia mirado con tal devoción y amor que no se le ocurrió pensar que ella no era su madre real.
Pero se sentia como una especie de moneda de cambio que la gente se pasaba cuando se cansaba.
Y claro, Benjamin se havia cansado de ella y se la enjaretaba a su madre.
Le dolia que Ben la tratase como un objeto...pero ¿que iva a esperar de el?
Realmente dudaba que la hubiese querido alguna vez.

Las lagrimas amenazaban con aparecer por sus ojos, pero Alex no pensaba dejarlas.
-Que te jodan Benjamin Linus - masculló por lo bajo dandole una patada a una piedra.

En esos momentos se sentia mas sola que nunca.

-Maldita sea, Arabelle...¿Donde estas?.- Murmuraba de camino al campamento, después de haberla buscado durante un tiempo en la selva. Ese día casi no la había visto, y seguramente estaba junto a Ben... No podía comprender como es que le gustaba tanto estar con él. Increíble. Me pasee un poco por el campamento, y allí estaba, sentada hablando con Benjamin y el nuevo que había llegado, el calvo de los cuchillo...Bah, ya hablaría con ella. Intente alejarme de la gente, buscar un sitio tranquilo donde poder sentarme y , yo que se, mirar como las estrellas comenzaban a aparecer en el cielo.

A los pocos pasos, pude oír unas palabras que se repetían en mi cabeza muchas veces. Sobretodo desde que estábamos en esa isla. Mire a mi alrededor, encontrando a Alex, la hija del señorito, algo molesta. Me acerque y me quede de pie a su lado, con las manos en los bolsillo, mirando al frente, despreocupado. -No crees que esa no es forma de hablar de un padre.- Comente, medio sonriendo. -Yo tambien pienso lo mismo, pero bueno, él no es mi padre...- Sabia que no lo era. Si, me habia enterado de ello. Arabelle me lo dijo. Pero no pretendia sacar el tema de la madre francesa y demas. Por lo menos no ahora, se la veia triste y decaida.- Vamos mujer, animate.- Le dije, dandole un pequeño golpecito con el codo, sonriendo.

-No crees que esa no es forma de hablar de un padre...

Alex entrecerró los ojos y se encaró al recién llegado dispuesta a soltarle una respuesta mordaz cuando constató que era Lazaro y además, sonreía.
-Hola -lo saludó educadamente.
Apenas conocía a Lazaro y a su hermana así que por ello no le caían ni mal, ni bien.
Aunque se le antojaban simpáticos.
Además Alex conocía el poco aprecio que parecía tener Lazaro por Ben, cosa que el corroboró al decir:
-Yo también pienso lo mismo, pero bueno, él no es mi padre...
Alex hizo una mueca.
Probablemente el, al igual que todo el mundo en el campamento, ya savia que Ben no era su padre realmente.
-Mi padre... -dijo con amargura- Mi padre parece que ha adoptado otra hija- dijo refiriéndose a lo bien que se llevaba con la hermana del muchacho.
Suspiró tristemente.
-Vamos mujer, animate.
Lazaro le dio un golpecito de animo que hizo sonreír a Alex.
En aquel lugar cualquier muestra de afecto era bien recibida.
-Gracias -le dijo sinceramente- Es que todo es tan.... -se le quebró la voz- ¿No te dan a veces ganas de ponerte a chillar como un loco y sacar toda tu mala leche? Así es como me siento ahora...con ganas de gritar y pegar a alguien.

Si, la verdad es que Arabelle pasaba demasiado tiempo con el señorito Linus. Señorito por que apenas me llegaba a la barbilla. -Bueno... Mi hermana es que es muy pelota. No se lo tomes a mal.- Deje escapar una leve risa, esperando que Arabelle nunca se entere de sus palabras. La sonrisa de Alex hizo que me sintiera algo mejor, no me gustaba ver a la gente triste, y bueno, aunque apenas la conocía, no pretendía que lo estuviera delante de mi.

¿Gritar? Eso era francamente fácil. Había una extensa isla en la que perderse y poder aullar a la luna como si fuéramos lobos. -La verdad, desde que llegue a esta isla he tenido ganas de gritas y desahogarme de una vez- Reí divertido. Acto seguido, cogí su mano y tire de ella, para que, justo antes de mirar a los lados por si nos veía alguien, adentrarme en la selva sin previo aviso. Acelere el paso sin soltar la mano de Alex hasta llegar a una zona lo suficientemente alejada del campamento en el que nos habiamos instalado. Solte su mano y sonrei como de costumbre, mirandola a los ojos.- No prentendo que me pegues. Sino...Creo que este es el momento perfecto para que sueltes toda ese enfado contenido y bueno... Grites.- Dije con total tranquilidad.-Desahogate, yo hare lo mismo- Rei mas que divertido. Aquello se hacia pocas veces en la vida, desahogarse de tal manera y habia que aprovecharlo...

Alex se sobresaltó cuando sin previo aviso el cogió su mano y se la llevó prácticamente a rastras a la selva. Aunque la situación, cómica de por si, la hizo sonreír.
El la soltó al llegar un rato mas tarde, cuando ya se habían alejado bastante del campamento.
Alex sonrió de nuevo...el chico le caía endemoniadamente bien y apenas habían intercambiado algunas palabras.
- No prentendo que me pegues. Sino...Creo que este es el momento perfecto para que sueltes toda ese enfado contenido y bueno... Grites.
Alex lo miró preguntándose si lo decía en serio o no.
Parecía que si.
Pensó en que quizá no debería...pero realmente tenia ganas de gritar. Allí no había nadie salvo ellos dos y además, la situación en si seria desternillante asi que cogió aire y gritó con todas sus fuerzas:
-¡Te odio Benjamin Linus!¡Te odio a ti, a Jacob y a este estúpido lugar!
De paso soltó en voz bien alta un par de tacos...y se sintió muchísimo mejor.
Su cara se había puesto roja y tenia el aspecto de una niña enfurruñada.
Miró de reojo al chico deseando que no huyese de ella pensándose que estaba tan loca como su madre.

La mirada de la muchacha lo decía todo por si solo. ¿Lo estaba diciendo en serio? Asentí, conteniendo la risa. Me cruce de brazos y permaneci mirandola, esperando que se desahogara como era debido. Cogio aire, y solto un grito, insultando al querido por todos, Ben. Cada vez me caía mejor esta chica. Me sorprendio la cantidad de tacos que habia soltado, asi que la mire con los ojos bien abiertos. Cuando me miro, me rei a carcajadas. De verdad, Alex pensaba lo mismo que yo.

-Creo que yo tambien deberia- Dije, sonriendo. Tome aire, y mire hacia el bosque. -¡Odio esta maldita isla. Odio a Benjamin Linus. Devuelveme a mi hermana de una vez!- Grite, suspirando, pudiendo decir al fin lo que habia retenido dentro de mi durante meses.

La cara de el al gritar también había adquirido un aspecto cómico así que Alex comenzó a reír.
Además la situación era de locos...allí estaba con un chico al que apenas conocía, en medio de la selva y gritando los dos como posesos.

Se dejó caer en la hierba y tomó aire.
Le llevó un rato y para colmo ahora tenia agujetas en las mejillas.

Miró las nuves algo mas relajada y volviendo la vista a el le dijo:
-Adoras a tu hermana.

No era una pregunta, eso se notaba a la legua.

-¿Sabes? -le dijo suspirando- Me da envidia...tener a un hermano que te proteja y te cuide...con el que contar siempre y en especial cuando las cosas se tuercen y bueno...con el que compartir la misma sangre ha de ser...guay.

Alex nunca había tenido un hermano...lo mas próximo a ello era en cierta forma, Karl y se suponía que Karl no era su hermano sinó su novio. Hacia tiempo que había dejado de poder contarle todo a Karl.

Hizo una mueca.

-¿Puedo preguntarte algo? -le dijo con una sonrisa amable- Si odias tanto la isla...¿como acabaste aquí?